15 Jul «Cultivando un futuro mejor», proyecto ideado por Cáritas Valencia en colaboración con Juniors MD, apoya el desarrollo integral de niños y adolescentes migrantes Recibe una subvención de 6.000 euros del Consell Valencià de la Joventut
‘Cultivando un futuro mejor’, proyecto solidario ideado por Cáritas de Valencia en colaboración con Juniors Moviment Diocesà para apoyar el proceso de socialización y el desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes migrantes, dispondrá de una subvención de alrededor de 6.000 euros del Consell Valencià de la Joventut.
El pasado domingo 26 de junio, la plataforma que aglutina y da voz a las organizaciones juveniles de la Comunitat Valenciana decidió en una reunión plenaria destinar el 1% de su presupuesto ejecutado en 2022 a esta causa, por lo que Cáritas Diocesana de Valencia dispondrá de la inversión necesaria para llevar adelante este programa de integración social, en el que participan residentes del Hogar Mare de Déu dels Desamparats i dels Innocents, situado en Torrent.
“Es una excelente noticia. Gracias a esta aportación tendremos la oportunidad de llevarlo a cabo tal y como lo habíamos concebido Cáritas y nosotros”, celebra el presidente Diocesano de Juniors M.D., Luis Albors.
En la misma línea, el director del Hogar, Pablo Mascaró, agradece la ayuda destinada a este centro concertado por la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas de la Generalitat Valenciana. Con este dinero se adquirirá todo el material necesario para implementar las sesiones, como las herramientas de jardinería, una estación meteorológica digital, los Equipos de Protección Individual, el combustible de la maquinaria, el material de oficina, el sustrato, los herbicidas, insecticidas y anti plagas y el alquiler de los contenedores en los que se depositan los restos de poda obtenidos.
‘Cultivando un futuro mejor’
Gracias a ‘Cultivando un futuro mejor’, durante los meses de verano alrededor de 15 jóvenes de hasta 18 años están asistiendo a un total de 10 talleres con contenidos teóricos y prácticos relacionados con el ámbito de la jardinería. Con este itinerario instructivo se busca, además de formar en cuestiones relacionadas con el ámbito agrícola, apoyar su proceso de socialización y su desarrollo integral, promoviendo habilidades para una vida independiente y la preparación para la transición a la adultez.
“Todo surge porque queríamos colaborar con Cáritas en algún proyecto que tuviera como protagonistas a niños, niñas y adolescentes migrantes, un colectivo que hay que integrar en nuestra sociedad para que tengan un futuro digno que les permita vivir en mejores condiciones que las que han tenido en sus vidas”, comenta Luis Albors. “Ya habíamos realizado alguna acción con estos jóvenes en nuestras actividades para favorecer su derecho al ocio y el tiempo libre y ahora hemos dado un paso más para, como su nombre indica, cultivar un futuro mejor”, añade.
Por su parte, Pablo Mascaró asegura que “está siendo una satisfacción enorme colaborar con el Movimiento Juniors en esta iniciativa, porque creo que la Iglesia tiene que trabajar en red. Un centro de Cáritas Diocesana como este tiene muchas oportunidades trabajando junto a otras asociaciones. Esto es un comienzo, pero las posibilidades son muchas. Agradezco al presidente que tenga una mirada tan abierta y que desde Juniors M.D. se apueste por esto, con todo lo que conlleva”.
Para hacer realidad este proyecto, se está utilizando una metodología innovadora denominada aprendizaje-servicio (ApS) en la que el alumnado aprende al mismo tiempo que colabora con la comunidad. En este sentido, algunas sesiones se realizan en el albergue de Juniors M.D., ‘La Llar Juniors’, ubicado en Náquera. Con este tipo de programas ApS, las personas destinatarias tienen un protagonismo activo y se presta un servicio solidario estrechamente vinculado a los contenidos curriculares planificados.
Hogar Mare de Déu dels Desamparats i dels Innocents
El Hogar Mare de Déu dels Desamparats i dels Innocents de Cáritas, situado en Torrent, es un centro de atención orientada al desarrollo holístico y comunitario de las personas usuarias. La entidad crea un recurso de acogimiento residencial que posibilita un entorno de convivencia seguro, inclusivo y abierto a la diversidad y en el que se garantiza la equidad en el acceso a los derechos, la igualdad de trato y oportunidades, la participación activa en todas las decisiones que afecten a los y las menores de edad y un abordaje integral de todos los ámbitos vitales y sociales, como la promoción de oportunidades de emancipación y vida independiente.
La mayoría de los residentes en este hogar han llegado en pateras o han conseguido entrar en los puertos como polizones de manera ilegal. Una vez en la costa española, al ser menores de edad, se les hace una identificación y se les envía a los centros de recuperación, desde donde son derivados a centros de acogida o pisos tutelados de Valencia, Barcelona y otras ciudades, o a otros países, como Francia.
Los y las menores de 16 años están escolarizados y el resto realiza también alguna formación profesional para aprender algún oficio y encontrar trabajo lo más pronto posible. Por las tardes realizan las tareas de la casa, como lavar su ropa, y disponen de tiempo libre. Hacen deporte y el hogar cuenta con una sala de televisión con juegos y ordenadores. También tienen dos horas al día para hacer salidas libres y quedar con compañeros y los fines de semana se organizan excursiones programadas, como a la playa o la piscina, según explican desde el centro.