04 Ago Un millar de Juniors conquistan Portugal en la Jornada Mundial de la Juventud Con la Delegación Diocesana de Juventud y con sus parroquias
Portugal se ha convertido estos días en la capital internacional del catolicismo gracias a la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Lisboa y en ciudades próximas. Este macroencuentro presidido por el papa Francisco se plantea como “una fiesta de la juventud, una expresión de la Iglesia universal y un fuerte momento de evangelización del mundo juvenil”. En el evento están participando millones de jóvenes de todo el planeta, entre ellos alrededor de 1.000 Juniors.
El grupo está formado por Educadores y Educadoras, Antiguos Educadores y Educadoras, adolescentes y Consiliarios de los Centros del Movimiento. Muchos de ellos se han inscrito a través de la Delegación Diocesana de Infancia y Juventud de la Archidiócesis de Valencia, apartado en el que los y las Juniors representan aproximadamente al 60% de asistentes. Sin embargo, no todas las personas participan por esta vía, dado que un buen número ha acudido a Portugal con sus parroquias, opción que se ha fomentado desde Juniors M.D. con el objetivo de fomentar la identidad parroquial.
El lema de Juniors M.D., ‘Sempre Units!’, está llegando este verano más lejos que nunca gracias a este encuentro y es habitual, tal y como comenta el Presidente Diocesano, Luis Albors, “ver por las calles de las ciudades en las que se están desarrollando los actos banderas con el crismón y pañoletas, muchas pañoletas nuestras andando de un sitio a otro, algunas de ellas muy grandes para que se nos vea bien, escuchar canciones que suenan en nuestras actividades…”. “Es una oportunidad única de compartir la fe con muchos jóvenes cristianos de muchas nacionalidades. Hay tanta gente que ha dicho sí a la llamada hecha por el papa, Vicario de Cristo en la Tierra, que resulta verdaderamente emocionante poder vivirlo en persona”, afirma el máximo responsable de Juniors M.D.
Programación
Tras los denominados Días en Diócesis, los peregrinos y peregrinas de València se unieron el pasado lunes 31 de julio al resto de asistentes españoles en Estoril, donde se llevó a cabo un encuentro multitudinario presidido por D. Juan José Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española. En él estuvieron presentes nuestro Arzobispo, D. Enrique Benavent, y su obispo auxiliar, D. Arturo Ros, quien preside la subcomisión episcopal de Juventud e Infancia.
El día siguiente la actividad se trasladó a Carcavelos, donde también se han programado distintos actos, entre ellos el encuentro celebrativo que reunió ayer miércoles 2 en el Jardín da Quinta da Alagoa a D. Enrique Benavent con los más de 3.000 peregrinos y peregrinas procedentes de nuestra diócesis.
Durante su intervención, el arzobispo animó a los jóvenes “a conservar en el corazón la alegría del encuentro con Cristo” y a extender esta experiencia más allá del encuentro, deseándoles “que permanezca y transforme nuestra vida”. Asimismo, les trasladó que no debemos buscar a Dios “en los signos de poder de este mundo”, sino que es en la Eucaristía donde “se encierra lo más grande que podemos tener en este mundo”. Por último, D. Enrique pidió que “los cristianos seamos semillas de un mundo mejor, más justo y más digno para el hombre, en el que haya paz”.
A partir de ahora se desarrollarán los actos centrales del acontecimiento, en los que estará presente el papa Francisco. Hoy, 3 de agosto, se realizará una ceremonia festiva, mañana habrá Vía Crucis, el sábado una vigilia con adoración al Santísimo Sacramento y el domingo 6 una eucaristía de envío, misa con la que se pondrá el punto y final a la JMJ.
“Al final, si me tengo que quedar con algo de esta experiencia sería, sin duda, con que somos muchos los jóvenes dispuestos a vivir siguiendo el estilo de vida de Cristo y a hacer ruido para que sepan que estamos aquí. En estos encuentros nos cargamos de energía y a la vez damos testimonio público de nuestra vivencia para que otras personas se acerquen a conocer el mensaje de Jesús, que es el que nos guía como cristianos y, en consecuencia, como miembros de Juniors Moviment Diocesà”, señala Luis Albors.