26 Ene El Papa nombra al misionero valenciano José Vicente Nácher Tatay nuevo arzobispo de Tegucigalpa, en Honduras En sustitución del cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga
El papa Francisco ha nombrado nuevo arzobispo de la arquidiócesis hondureña de Tegucigalpa al misionero valenciano José Vicente Nácher Tatay en sustitución del cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga.
El religioso José Vicente Nácher, perteneciente a la congregación de la Misión Padres Paúles nació el 10 de abril de 1964 en Valencia. Licenciado en Sociología por la Universidad de Alicante, posteriormente cursó estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Mayor de la Congregación de la Misión de Barcelona y en la Facultad de Teología de Cataluña.
Emitió su profesión solemne en la Congregación de la Misión el 20 de enero de 1990 y fue ordenado sacerdote el 26 de octubre de 1991. Desde el año 2000 está como misionero en la país latinoamericano.
En Honduras ha desarrollado los siguientes cargos: párroco de San Vicente de Paúl en San Pedro Sula (2000-2005), párroco de San José en Puerto Lempira (2006-2016) y vicario episcopal de la Mosquitia en la Diócesis de Trujillo. Además desde 2016 es superior de la Congregación de la Misión en Honduras.
Entre los proyectos que ha llevado a cabo el misionero valenciano en Honduras figura la creación de una radio parroquial con energía renovable procedente de la luz solar como medio de evangelización, de formación y de comunicación entre los habitantes de la región de la Mosquitia que carecen de medios de acceso a internet o cobertura telefónica.
Además, también impulsó la creación de dos proyectos educativos en la zona tropical hondureña de La Mosquitia que atienden aproximadamente a 1.100 jóvenes y niños al mes con meriendas, formación y actividades deportivas.
El primero de estos centros llamado “Brotes Nuevos”, abrió en 2005 con la ayuda de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, como respuesta a la difícil situación de violencia en Puerto Lempira. Cada mes se ocupan de 400 menores, de 6 a 14 años, con meriendas, atención pediátrica, clases de refuerzo y actividades deportivas.
El segundo centro se denomina “Asla Wapaia”, que quiere decir “Juntos Caminando”, y lleva en marcha diez años atendiendo cada mes a 700 jóvenes que realizan actividades deportivas, cursos de danzas típicas, idiomas y música, talleres, refuerzo escolar y charlas formativas, además de participar en la radio parroquial.