11 Nov Ontinyent celebra la tradicional procesión de bajada de la imagen de la Purísima Desde su capilla a la parroquia de Santa María
La localidad valenciana de Ontinyent celebrará mañana, sábado, la procesión de bajada con el traslado de la imagen de su patrona, La Purísima, desde su capilla al altar mayor de la parroquia de Santa María.
El traslado comenzará a las 18:15 horas y posteriormente se celebrará una eucaristía donde tendrá lugar la imposición de medallas a la nueva junta de la Asociación de Fiestas de la Purísima y la promoción de camareras, según ha indicado el párroco Antonio Ferrando.
Las fiestas en honor a la patrona comenzaron el pasado 4 de noviembre con la presentación del cartel y programa revista de las fiestas a cargo del músico, compositor e investigador musical Rubén Penadés.
Las celebraciones continuarán el próximo 19 de noviembre con una vigilia eucarística de la Adoración Nocturna y el domingo, 20 de noviembre, con una misa en sufragio de los socios difuntos de la Asociación de Fiestas de la Purísima.
Asimismo, el último fin de semana de noviembre se celebrará el tradicional pregón de las fiestas con el desfile “dels angelets”, niños vestidos de ángeles que recorrerán las calles de la localidad desde la plaza de la Concepción hasta la parroquia.
Ya en la parroquia los “Angelets” le cantarán a la Purísima, se celebrará la lectura del pregón y finalmente se interpretarán los gozos a la Virgen. Ese mismo día por la mañana se celebrará la misa sabatina en la que se entregarán las medallas de la Purísima a los “angelets” que luego saldrán por la tarde en procesión cantando a la patrona.
Los actos continuarán el domingo, 27 de noviembre, con el inicio del novenario en honor a la Purísima. El día grande de las fiestas, el 8 de diciembre, la Misa de Descubrir se oficiará a las 6 horas y a las 11 horas tendrá lugar la solemne Misa de Pontifical.
La Inmaculada tiene una devoción “muy antigua y arraigada en Ontinyent, donde en 1662, casi 200 años antes de que fuera declarado por Pío IX el dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, la localidad celebró ya las primeras fiestas solemnes en su honor, autorizadas por un documento del papa Alejandro VII”.