La objeción de conciencia para defender la vida humana “tiene lagunas que la ley no contempla” y deberían ser reguladas José Landete, profesor de Derecho en la Universitat de València:  con leyes como la del aborto o la eutanasia “fracasa el actual ordenamiento jurídico porque no protegen al más débil”

La objeción de conciencia para defender la vida humana “tiene lagunas que la ley no contempla” y deberían ser reguladas José Landete, profesor de Derecho en la Universitat de València:  con leyes como la del aborto o la eutanasia “fracasa el actual ordenamiento jurídico porque no protegen al más débil”

La diócesis de Valencia se suma a la Jornada por la Vida que la Iglesia celebra cada 25 de marzo- Día Internacional de la Vida- con numerosos actos y celebraciones, entre ellos, mesas redondas sobre la objeción de conciencia- frente a las leyes del aborto o eutanasia- , ante la que expertos en Derecho, como el profesor de la Universitat de València José Landete advierte de la existencia de “lagunas o zonas oscuras que la ley no contempla” y que deberían ser reguladas.

La objeción de conciencia “no es un derecho fundamental” pero va aparejada o vinculada al derecho a la libertad ideológica y de conciencia que recoge la Constitución Española y, en España, está reconocida y regulada en las leyes del aborto y eutanasia: “existe objeción de conciencia si las leyes que imponen el deber prevén la posibilidad de objetar a ese deber”.

En el artículo 16 de la Constitución se garantiza «la libertad ideológica, religiosa y de culto de los individuos» y se reconoce que «nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias». Sin embargo, las actuales leyes del aborto o eutanasia establecen requisitos para ejercer la objeción de conciencia “que conllevan restricciones a su libre ejercicio”.

Así, un primer requisito para poder ejercer la objeción de conciencia y negarse a realizar un aborto o eutanasia, es que “sólo puede objetar el personal sanitario directamente involucrado en la práctica de ese aborto o eutanasia”.  Por tanto, “no podrá objetar aquel personal sanitario que esté indirectamente implicado en su práctica”.

De esta manera, quedan excluidos aquellos profesionales que pudieran realizar el seguimiento del embarazo,  en su proceso anterior o posterior, o aquellos que pudieran intervenir antes o después de un aborto, como los médicos anestesistas.  También, en el caso de la dispensa de las píldoras abortivas en farmacias,  “la ley no es clara a la hora de decir si los farmacéuticos pueden objetar o no, si tienen ese derecho o no”. Igualmente ocurriría con las técnicas de reproducción artificial porque “aquí la ley no reconoce el derecho a objetar”.

Además, el derecho a la objeción de conciencia podrá ejercerse mientras “quede garantizada la prestación de ese servicio en la sanidad pública o privada” y no ponga en riesgo la realización de esa práctica, solicitada -en el caso del aborto- por la mujer que quiere interrumpir su embarazo.
El registro público del objetor de conciencia “es algo inaudito en nuestro ordenamiento jurídico” y va en contra del artículo 16.2 de la Constitución

Asimismo, otro requisito que impone la ley – tanto la del aborto como la de la eutanasia- es que los médicos objetores figuren en un registro del Ministerio o de las Consejerías autonómicas en el que previamente informan de que no practicarán abortos – con lo cual “no se respeta el artículo 16.2 de la Constitución Española que defiende que nadie será obligado a declarar su ideología religiosa o de creencias”.

Según José Landete, “el tener que constar en un registro público para ejercer un derecho es algo inaudito en nuestro ordenamiento jurídico”. El sistema “debería ser el contrario, es decir,  inscribir a aquellos médicos que están dispuestos a practicar el aborto”.  Según el experto se trata de “una posición ideológica que lo que busca es perseguir a los médicos objetores haciéndoles que se descaren ante la Administración, y que recuerda mucho a la época del régimen nazi en el que los judíos tenían que inscribirse en un registro público para que el régimen conociera su número”.

“El Derecho nació para proteger al más débil”, sin embargo estas leyes reafirman la “ley del más fuerte”

Conforme explica Landete, “el Derecho nació para la protección del más débil y nosotros nos hemos constituido en una sociedad para proteger al débil para que no rija la ley de la naturaleza del más fuerte».

Sin embargo, ante la problemática del aborto o eutanasia “lo que estamos haciendo es confirmar la ley del más fuerte, el derecho está desprotegiendo a los más débiles, en este caso, a las personas que no han nacido todavía o a las personas que se considera que su vida no es digna”, afirma.

Por eso,  “aquí está fracasando todo el ordenamiento jurídico, todos los fines propios del Derecho por tanto el Estado está traicionando su fundamento”. “Cuando el indefenso no tiene la defensa de la ley está sometido a la ley de la naturaleza del más fuerte”.

Repercusión del derecho a objetar en el contrato de trabajo de los profesionales sanitarios

De igual forma, como bien apunta José Landete, también hay algo que no se ha previsto y puede ser relevante que es la repercusión del derecho a objetar en el contrato de trabajo de los médicos o profesionales sanitarios.

Así, el experto se pregunta si, por ejemplo, un médico que objetara a practicar un aborto pudiera ser injustamente despedido o discriminado en sus derechos laborales con respecto a otros compañeros que no son objetores.

La diócesis de Valencia celebra la Semana por la Vida

La Plataforma “Valencia, Sí a la Vida” ha organizado, en colaboración con el Secretariado Diocesano para la Defensa de la Vida del Arzobispado, la Semana por la Vida, del 23 al 30 de marzo, con mesas redondas y jornada de ayuno voluntario y oración, entre otros actos, de los que destacan la misa presidida por el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, con bendición de embarazadas y familias en la Catedral, el 26 de marzo, y la participación en la “Marcha por la Vida” en Madrid, el domingo 27.

Antes de la misa en la Catedral, tendrá lugar la entrega de premios del XII Concurso de Dibujo Infantil sobre la Vida, organizado por Torrent Sí a la Vida, acto que presidirá el cardenal Cañizares en el Palacio Arzobispal a las 16:30 horas.

En cuanto a las mesas redondas, se ha celebrado una este jueves 24 y la siguiente será el miércoles 30 de marzo. La primera de ellas llevó por título “Objeción de conciencia. Derecho a decidir” y tuvo lugar en la sede de San Juan y San Vicente de la Universidad Católica de Valencia (UCV).

Participaron  Ginés Marco, decano de la Facultad de Filosofía, Letras y Humanidades de la UCV; Eva María Martín y Antonio Díez, presidenta y coordinador general de la Asociación Nacional de Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia, respectivamente.

La segunda, que será el último acto de la Semana por la Vida, llevará por título “¿La defensa de la vida puede atentar contra la libertad?” y tendrá lugar el día 30, a las 19 horas, en el Palacio de Colomina, sede de la Universidad Cardenal Herrera CEU (se podrá seguir también a través del Youtube de CEU-UCH https://youtu.be/qcl0I2TfyHw).

Contará con la participación de Jaime Mayor Oreja, presidente de One of Us e impulsor de NEOS; María Solano, decana de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Comunicación de la Universidad CEU San Pablo; y Jesús Poveda, médico y profesor del Departamento de Psiquiatría de la Universidad Autónoma de Madrid.

Por otro lado, este viernes 25 se invita a realizar una jornada de ayuno voluntario y oración por la vida humana y tendrá lugar la “Velada 25 por la vida” en la calle Pedro II el Ceremonioso, 7, de Valencia.