III Jornadas Doctrina Social de la Iglesia “Solidaridad y Esperanza. Una llamada a la Gaudium et Spes”, en la Universidad CEU Cardenal Herrera Con la intervención del catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Roma III, Andrea Ricardi

III Jornadas Doctrina Social de la Iglesia “Solidaridad y Esperanza. Una llamada a la Gaudium et Spes”, en la Universidad CEU Cardenal Herrera Con la intervención del catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Roma III, Andrea Ricardi

  • “La Iglesia tiene mucho que decir al mundo, viviendo de la esperanza y la simpatía que el Señor nos comunica”
  •  El catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Roma III, Andrea Ricardi, ha pronunciado una conferencia 

El Instituto de Humanidades Ángel Ayala, en colaboración con la Universidad CEU Cardenal Herrera, ha organizado las III Jornadas Doctrina Social de la Iglesia “Solidaridad y Esperanza. Una llamada a la Gaudium et Spes”, celebradas en el Paraninfo de la CEU UCH en Alfara del Patriarca (Valencia).

La Jornada ha sido inaugurada por el Vicerrector de Calidad y Estudiantes, Javier Montañez, acompañado del delegado del Instituto Ángel Ayala en la CEU UCH, Emilio Callado y coordinada por el profesor Jesús de la Llave en colaboración con la profesora M. José Cano. El profesor Callado ha destacado la oportunidad de poder llevar esta materia fuera de las aulas para conectarla con la actualidad, ya que han asistido los estudiantes que cursan la asignatura “Doctrina Social de la Iglesia” en diversos Grados de la CEU UCH.

La conferencia principal de la jornada ha corrido a cargo de Andrea Riccardi, Catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Roma III y fundador de la Comunità de Sant’Egidio (1968). El profesor Riccardi -que es autor de múltiples libros sobre la problemática de la Iglesia en el siglo XX y fue nombrado Doctor Honoris Causa por la CEU UCH en 2004- ha aceptado la invitación del CEU a estas jornadas, porque considera que en esta universidad “podéis estudiar bien, con una orientación profunda y justa”, según ha comentado a los estudiantes presentes. También ha señalado que le gustaría contribuir con su visita a rendir un pequeño homenaje a esta tierra, golpeada por la tragedia de la DANA.

El catedrático de Derecho Eclesiástico del Estado en la CEU UCH, Remigio Beneyto, ha presentado al profesor Riccardi señalando los puntos más destacados de su extenso currículum. Concretamente ha recalcado su encomiable trabajo en la Comunidad de Sant’Egidio, una asociación de laicos católicos con centro en el barrio del Trastevere (Roma) que cuenta con más de 50.000 miembros en alrededor de setenta países, dedicada a promover el diálogo y el ecumenismo en todo el mundo. La oración, los pobres y el trabajo por la paz, son los tres elementos que caracterizan su trabajo, ha destacado el profesor Beneyto. Riccardi ha intervenido como mediador en diversos conflictos internacionales y ha recibido numerosos premios y reconocimientos por su trabajo.

¿Tiene la Iglesia algo que decir al mundo de hoy?

Con el título “¿Tiene la Iglesia algo que decir al mundo de hoy?. A los 60 años de la Gaudium et Spes (1965)”, la conferencia del profesor Riccardi ha girado en torno al contenido de esta importante constitución pastoral del Concilio Vaticano II que trata sobre el papel de la Iglesia en el mundo contemporáneo, defendiendo su plena actualidad.
Riccardi ha explicado que, si bien anteriormente se había podido interpretar que la salvación había que lograrla como un objetivo individual, Pablo VI no la concebía sin estar vinculada a la salvación de los demás. Y ha recordado las palabras del Papa Francisco “nadie se salva sólo”, como una llamada a reconocer que estamos hechos para vivir en comunidad, para sostenernos unos a otros y para entender que solo juntos podemos salir adelante.

El catedrático Riccardi se ha dirigido a los estudiantes presentes en la sala: “El concilio sea quizás algo pasado para la mayoría de vosotros, pero en esos años conciliares y postconciliares existía un entusiasmo por el mundo contemporáneo. Utilizo la palabra “entusiasmo” no cómo algo superficial sino profundo, pues el espíritu de la Gaudium et Spes era compartir su pasión por el mundo y el clima en que se escribió era de optimismo, en medio de la situación existente”.

“Estamos celebrando el jubileo de la Esperanza -ha explicado Riccardi- y muchos contemporáneos nuestros han renunciado a la posibilidad de cambiar la historia, considerando que la fe es un equipaje pesado. Pero la realidad es que, sin la fe, no se resiste ni se puede avanzar en cualquier batalla difícil. Algunos han renunciado a cambiar el mundo porque vivir en el mundo no es fácil ni cómodo, pero sólo los hombres espirituales pueden amar apasionadamente al mundo y conducir a la humanidad a un destino mejor. Un cristiano, un hombre y una mujer espirituales, con su amor y pasión interiores, pueden transformar la humanidad. Por eso los cristianos tienen la responsabilidad de humanizar el mundo y formar personas capaces de humanizarlo. La Iglesia cree que el hombre es el artificie de la verdadera renovación del mundo”.

El profesor Riccardi ha recordado una expresión del Talmud en la que resuena la sabiduría universal “Quien salva una vida, salva al mundo entero”, señalando que ayudar a una sola persona es el inicio de un proceso que vivifica a la humanidad entera. “Esta ayuda surge de una vivificante energía de amor por parte del ser humano; se cambia el mundo cuando asistimos a un anciano abandonado o realizamos cualquier gesto de humanidad (…). El hombre espiritual es un hombre libre, que cualquier cosa que toca la transforma en oro. El cristiano es un místico con los ojos abiertos, que mira la realidad para cambiarla. La Gaudium et Spes funda una mística de los ojos abiertos”.

“El cristianismo de la Gaudium et Spes es una religión de la simpatía, en medio de un mundo lleno de odio y antipatía”, ha señalado. “Por eso la personalidad del cristiano es vivir las alegrías y las esperanzas del otro, pues todo le interesa (…) El sacramento del pobre y el sacramento del Altar no se pueden separar, porque Cristo está en la persona del pobre”. Y ha finalizado su intervención señalando que la Iglesia tiene mucho que decir al mundo, “viviendo la esperanza y la simpatía que el Señor nos comunica. La Gaudium et Spes reivindicaba un signo de los tiempos: la unidad de los cristianos. Por eso ahora debemos reivindicar la paz”.

Tras esta conferencia, la Jornada ha continuado con la Mesa Redonda “Hacer realidad la solidaridad: instituciones y voluntariado”, en la que han participado los profesores de la CEU UCH Alfonso Martínez-Carbonell López, Jaime Vilarroig Martín, Domingo Pacheco Machado y Enrique Lluch Frechina y que ha estado moderada por el profesor Isidro Rodriguez Marugán.

La ponencia de clausura ha corrido a cargo de Agustín Domingo Moratalla, Profesor de Filosofía Moral y Política en la Universidad de Valencia y director del Centro Docente y de Investigación de la UIMP, que ha sido presentado por la profesora de la CEU UCH María José Cano Alarcón. El título de su ponencia ha sido “Servir a la esperanza en tiempos de aceleración y desconcierto digital”.