14 Nov Enrique Benavent: “Tantas veces las realidades cristianas, siendo pequeñas, dan muchos frutos” El Arzobispo preside la Jornada Lateranense en la Universidad Católica de Valencia
- José Manuel Pagán, rector de la UCV: “Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco nos han ayudado a redescubrir la vocación al amor de toda persona”
- Juan Antonio Reig Pla ha impartido la lección magistral, titulada “La enseñanza social de la encíclica Humanae vitae de san Pablo VI”
UCV, 14 noviembre – El Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II para Estudios sobre el Matrimonio y la Familia ha iniciado el curso con la celebración de la Jornada Lateranense, que ha presidido por primera vez como vice gran canciller del centro académico el Arzobispo y gran canciller de la Universidad Católica de Valencia (UCV), Enrique Benavent. Le han acompañado el rector de la UCV, José Manuel Pagán, y el obispo Juan Antonio Reig Pla, que ha impartido la lección magistral, titulada “La enseñanza social de la encíclica Humanae vitae de san Pablo VI”, donde ha descrito el contexto cultural y sociológico en el que fue publicado este documento y la necesidad de respetar la dignidad de la persona en la valoración moral de los métodos de regulación de la natalidad.
Benavent ha concluido el acto felicitando a una institución “consolidada en nuestra diócesis, cuya integración en la Universidad Católica de Valencia le ha dado todavía más solidez. Aunque nos gustaría que fuera cuantitativamente más grande, tantas veces las realidades cristianas, siendo pequeñas, dan muchos frutos. En la Iglesia tenemos que saber distinguir el éxito aparente. Pensemos en los frutos que este instituto ha ido produciendo a lo largo de estos años y en el gran servicio que está prestando a la Iglesia universal”.
Por ello, ha animado al claustro a continuar trabajando con “ilusión” en esta institución que fundó el papa san Juan Pablo II: “No sólo nace de una idea buena, sino de una necesidad de la Iglesia y la sociedad en el momento actual. No hay que dejarse vencer por las dificultades”, ha reconocido el arzobispo, que fue profesor de este instituto en sus primeros años de funcionamiento, hasta que le nombraron obispo auxiliar y tuvo que renunciar a muchas actividades académicas que desempeñaba.
En relación a la lección inaugural, el gran canciller de la UCV ha incidido en que “la fidelidad al magisterio no está reñida con la misericordia y el acompañamiento a las personas en su camino de crecimiento cristiano, que es el camino hacia la santidad. En esa perspectiva es donde se pueden unir fidelidad a la tradición, fidelidad al Evangelio, fidelidad a la enseñanza de la Iglesia con la misericordia con la que deben ser acogidas en la Iglesia todas las personas”.
Asimismo, ha reconocido tanto la “validez” como el carácter “profético” del texto: “Cuando Pablo VI escribió la Humanae Vitae, muchos fenómenos que hoy estamos viviendo ni se imaginaban. Sin embargo, cuántos temas hay que son actualmente de rabiosa actualidad. Cuando uno analiza la encíclica, los principios que la animan en profundidad permiten dar una respuesta auténticamente cristiana y auténticamente humana a toda esta problemática”.
José Manuel Pagán: “Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco nos han ayudado a redescubrir la vocación al amor de toda persona”
Por su parte, el rector de la Universidad Católica de Valencia, José Manuel Pagán, ha reconocido que “en una época de división y ruptura como la que vivimos, también en la Iglesia, es importante poner en valor la continuidad y el progreso anclado en la tradición, fieles a las raíces, que son las que custodian nuestra identidad”. En este sentido, “desde que en 1981 se crea el instituto en Roma y en 1994 se pone en marcha la sección española en Valencia, hemos podido constatar cómo Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco nos han ayudado a redescubrir -todos ellos, de distinta forma, pero de manera inequívoca- la vocación al amor de toda persona”.
Así, ha asegurado que “si la vocación al amor es constitutiva del ser humano, si la persona llega a la perfección en la medida en que ama, nuestra universidad tiene que enseñar a los jóvenes universitarios a amar. Y en esta misión necesitamos del Instituto. Nuestros jóvenes se encuentran muchas veces asustados, como aquellos marineros de las Vidas paralelas de Plutarco, de los que nos habló el profesor Noriega, precisamente en un acto homenaje a la Humanae Vitae en 2018. Pompeyo saltó al barco y retó a los marineros: Navigare necesse est. Vivere non necesse est (Navegar es necesario. Vivir no es necesario). Inmediatamente, todos saltaron al barco, levaron anclas y desplegaron velas. Habían entendido que el sentido de la vida era más grande que el vivir”.
“Ojalá todos los profesores de nuestra universidad descubran en cada joven una persona con una vocación de plenitud que sólo alcanzará por sí mismo, pero no por sí solo. Ojalá sepamos acompañarlos para que adquieran una madurez propia”, ha asegurado Pagán, que también ha manifestado su alegría “por poder escuchar de nuevo en nuestra universidad a Juan Antonio Reig y confirmar que sigue anunciando a Cristo con el mismo criterio, rigor y pasión de siempre”.
Durante la sesión, celebrada en la sede Santa Úrsula, el secretario de la institución, Francisco Jiménez, ha procedido a la lectura de la memoria del curso 2022-2023, en el que se matricularon más de 50 alumnos de distintos países en el Máster en Ciencias del Matrimonio y la Familia y en la Licenciatura en Teología del Matrimonio y la Familia.