Cuando la muerte te lleva a la Vida Testimonio de Laura Montesinos, autora del libro "Tu muerte es vida"

Cuando la muerte te lleva a la Vida Testimonio de Laura Montesinos, autora del libro "Tu muerte es vida"

Laura Montesinos, con el libro que ha escrito, en sus manos (Fotografías: V. Gutiérrez)

TEXTO: CARLOS ALBIACH

A Laura Montesinos, valenciana y médico de familia, le cambió la vida el 18 de mayo de 2018, cuando su marido, con el que tenía una hija de dos años, falleció de muerte súbita. Aquel acontecimiento, “no exento de dolor y sufrimiento”, le hizo acercarse más a Dios, sentirse amada por él y descubrir que la muerte le ha llenado de vida. Ahora ha querido contar lo que Dios ha hecho en su vida con en el libro, recién publicado, ‘Tu muerte es vida’.

¿Cómo vivió la muerte de su marido?

-Tenía 32 años, llevábamos 5 años casados y teníamos una hija de dos años, Rocío. Tenía una vida normal, como cualquier persona, y sin quererlo, porque fue una muerte súbita, de un día para otro mi vida cambia. Mi vida cambia, se desmorona y desaparecen todos los planes que había planificado y proyectado. Pero en ese momento tengo la gran suerte de que el Señor me dio una luz y pude ver que la muerte no es muerte sino que la muerte es vida y descubrir el sentido de la muerte, el sentido de la vida, el sentido del dolor y sobre todo el sentido del amor, porque al final si algo he descubierto es que venimos a este mundo a muchas cosas pero principalmente a una y es a amar. Nadie nos va a preguntar si hemos sido médicos, si hemos trabajado en un sitio, cuántos hijos hemos tenido… ¿Cuánto amor has puesto en tu trabajo? ¿Cuánto amor has puesto en tu familia? ¿Cuánto amor has puesto con tus amigos? Esto es una cosa que no es que no supiera antes pero con la llegada de la muerte de mi marido el Señor lo ha llevado a mi corazón, le he puesto nombre y lo he descubierto con una gran claridad.

¿Hubo algo en concreto que te ayudase a ver el sentido de la muerte?

Pues la misma muerte. Es un momento, cuando menos te lo esperas y de repente entendí por qué previamente habían pasado unas cosas en mi vida y es como que todo adquiere sentido. Ves que la piezas del puzzle van encajando y de repente dices ya está, ya lo veo, ya lo tengo claro. Yo siempre había sido católica, practicante, pero más de herencia, no tanto de creencia y de vivencia. Pasé de un Dios teórico a un Dios vivo en mi corazón y eso es lo que ha transformado mi vida para siempre.

¿Cómo le explicarías a alguien que la muerte tiene sentido, que no es el final?

-Para los católicos y para los que creemos, la muerte no es el final. La vida es un instante entre dos eternidades, como decía Santa Teresita de Lisieux. Venimos aquí para preparar la vida del cielo, por lo que te das cuenta de que la muerte no es el final y que la muerte es la puerta a la verdadera vida a la que estamos llamados, que es la vida eterna. Cuando sabes esto tu vida cambia y ya nunca puedes vivir igual. Aunque no sabemos ni el día ni la hora sí que sabemos que cada día que pasa es una oportunidad que si no la aprovechas es una oportunidad perdida para ganarnos el cielo. Al final este es nuestro camino al cielo y el camino nos lo tenemos que labrar aquí, el tiempo apremia y si no nos espabilamos y nos damos cuenta del sentido de nuestra vida pues estamos realmente perdiendo el tiempo.

(Fotografías: V. Gutiérrez)

¿Cómo has sentido en este camino la ayuda de la Iglesia?

– Me han ayudado muchísimas personas y yo creo que son personas que desde el cielo te ponen para que vayas descubriendo a Dios. Lo que estoy contando es una historia real desde la primera palabra hasta la última, no es un dogma de nada, es lo que yo he vivido en mi corazón. He visto que la iglesia es madre y la Iglesia somos todos. Todas esas personas me han mostrado qué es la Iglesia. Sin la Iglesia y esas personas yo hoy no estaría aquí tampoco. Me he sentido arropada por la Iglesia y por muchos de sus movimientos.

En todo este proceso, supongo, que habrán habido momentos de mucho dolor y sufrimiento a todo los niveles.

– Uno de los descubrimientos más grandes que he hecho en estos cinco años es descubrir el sentido del dolor y de la cruz, porque Dios es cruz. Cuando uno sufre, cuando uno tiene una situación dolorosa en su vida se identifica con Cristo porque Cristo murió en la cruz con el mayor dolor que se puede experimentar. Entonces, en el dolor se identifica un poquito más con Cristo, es un poquito más Cristo y Dios es amor. Entonces, ese dolor se transforma en amor y esa es la clave. Yo he tenido la suerte de poder descubrir en ese dolor a Cristo.

¿Cómo ha vivido la maternidad desde la muerte de su marido?

-Hay que confiar, es un tema de confianza. No eran mis planes para nada, porque nunca jamás me hubiera imaginado una maternidad como la que hoy tengo. Este es el camino que yo tengo, pues aquí es donde yo tengo que labrarme mi futuro al cielo y donde yo tengo que realizarme como persona y encontrar la felicidad y ser alegre. Porque al final, el que se siente fuertemente amado, como me siento yo, pues no puede perder la alegría. Y entonces, con todas las dificultades que tengo, que son diarias y muchas, pues ya está, me fío. Intento luchar para que esto siga adelante y ya está. Y además, pues nos queremos muchísimo y, oye, pues es una maternidad que nunca me hubiera imaginado, pero es maravillosa también, la verdad.

¿Cómo tratas el tema de la muerte con tu hija?

– La gente no habla de la muerte porque le tiene miedo. Como es obvio, nadie, sabemos lo que es la muerte. Nadie ha venido del más allá a contarnos lo que es la muerte. Lo hago con mucha naturalidad. Al final, los niños se creen lo que nosotros les contamos. Y nosotros queremos lo mejor para nuestros hijos. Entonces, yo quiero que mi hija entienda la muerte como la entiendo yo, con la naturalidad. Porque es que no hay nada más natural que la muerte. Es lo único que tenemos asegurado todos.

Por lo que dices, ves que tu marido con su muerte tenía una misión. ¿Ves que tu marido te sigue ayudando?

– Él no me ha dejado nunca. Manu vive y vive para la eternidad. Está presente y me ayuda. Manu ha estado conmigo en el proyecto de escribir el libro. En la salud y en la enfermedad todos los días de mi vida.

Desde la muerte también has hecho presente tu testimonio en las redes sociales con el perfil de Instagram @viajarentrelineas

– Cuando uno descubre el amor, en mayúsculas, te cambia la vida para bien. Y yo no he dejado de contar lo que Dios ha hecho conmigo. Es importante que se vea que Dios actúa en la vida de la gente. Es importante dar testimonio para que vean que Dios se ha encarnado en una vida, en una historia concreta. También junto a otras personas hemos fomentado el rezo del Rosario a través de lo que hemos llamado ‘Macrofiestas del Rosario’ todos los domingos por la noche. Además, doy muchísimas gracias al cielo al haber podido ver con mis ojos que ha habido personas que a través de mi testimonio y de mi oración, entre otras cosas, ha transformado su vida.

Presentación en Valencia, el 8 de noviembre

‘Tu muerte es vida. Una historia de confianza y amor eterno’ (Editorial HarperCollins) será presentado en Valencia el próximo 8 de noviembre, a las 19 horas, en la sede San Carlos de la Universidad Católica de Valencia (C/Quevedo, 2). El acto será presentado por Majo Gimeno, de Mamás en acción.

El libro se puede adquirir en las principales librerías y a través de Amazon.