04 Dic Cardenal Cañizares, a la UCV: “Gracias de verdad, de todo corazón” Despedida del gran canciller, en la Universidad Católica de Valencia
El cardenal Antonio Cañizares, gran canciller de la Universidad Católica de Valencia (UCV) durante ocho años, se ha despedido de la comunidad universitaria con la celebración de una misa.
En la iglesia de la Sede Santa Úrsula, repleta de profesores, alumnos y personal de administración de servicios, ha dado “las gracias de verdad, de todo corazón. No ceséis el empeño hacia delante con la universidad que estáis creando; colaborad enteramente en comunión con mi querido sucesor y amigo don Enrique. Gracias y perdonad si no os he ayudado más, si no he hecho más y mejor por esta universidad que tanto ha de ayudar a la ciudad de Valencia. Adelante y ánimo, mucho ánimo”.
«No tengáis miedo. Con valentía y libertad»
“Son tiempos difíciles para la sociedad española, pero también para la universidad católica. No tengáis miedo. Con valentía y libertad. La valentía de la verdad y la libertad de la sabiduría. Adelante pues. Todo lo que habéis hecho conmigo, todo lo que estáis haciendo, seguid haciéndolo; con mucho ánimo, proseguid vuestro camino. Bendito sea el nombre del Señor”, ha expresado.
Previamente, en la homilía, ha recordado la razón de ser de la Universidad Católica de Valencia: buscar la verdad plena, la de Dios y la del hombre. “¿Dónde podría el hombre buscar la respuesta a las cuestiones dramáticas como el dolor, el sufrimiento de los inocentes, la muerte? ¿Dónde encontrar respuestas a tantísimas preguntas que plantea la pandemia, el coronavirus, la guerra, si no es en la cruz de Jesucristo, en la que nos es dado el Hijo de Dios?”.
“La Universidad Católica de Valencia sigue definiéndose por su dedicación a la ciencia, por la investigación y la docencia. El joven que llega a esta universidad ha de encontrar en ella no sólo el hábito de formarse para ejercer una determinada profesión, sino, sobre todo, el lugar donde ha de sumarse a la verdad plena sobre el mundo, el hombre y su destino inseparable de Dios”, ha insistido. Igualmente, ha recordado la vocación de esta institución: “Poner al servicio de la humanidad los diferentes conocimientos de la ciencia y el pensamiento sin caer en una tentación de objetividad que pueda volverse contra el hombre, pervertirle y destruirle”.
José Manuel Pagán: “Durante estos años ha sido un testigo y un maestro”
El rector, José Manuel Pagán, ha trasladado al cardenal Cañizares su agradecimiento personal y el de la comunidad universitaria por su servicio como arzobispo de la diócesis y como gran canciller de la UCV: “Ha sido un regalo tenerlo como pastor, motivo por el cual damos gracias a Dios. Durante estos años ha sido un testigo y un maestro. Nos ha enseñado que sólo Dios basta, como tantas veces nos recuerda, citando a Santa Teresa. Nos ha recordado y nos seguirá recordando que no podemos permanecer pasivos e indiferentes, acomodados y aburguesados en la orilla, sino que hay que navegar mar adentro, duc in altum, como usted tantas veces dice”.
“Nos ha transmitido también -y la homilía de hoy ha sido un legado final- esa pasión suya por la verdad, por buscar la verdad, para que nuestra universidad sea un espacio donde profesores y alumnos busquemos la verdad y la transmitamos sin miedo”, ha añadido.
Como signo de dicho agradecimiento, se le han entregado al cardenal Cañizares dos regalos. El primero, una cruz “a la que poderse dirigir en la eucaristía y en la oración; le pido que cuando la contemple se acuerde de nuestra universidad y de todos los que la conformamos”, ha afirmado el rector. Además, un álbum de fotos que recoge su trayectoria en esta casa. “Cuando lo ojeaba, de mi corazón brotaba el canto del salmista: «El Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres»; es el sentimiento de todos los que hoy estamos aquí; el agradecimiento a su pastoreo en la universidad y en la diócesis. Ha sido un placer poder seguirle”, ha concluido Pagán.