Monseñor Enrique Benavent preside la celebración de la Candelaria en el Colegio Imperial de San Vicente Ferrer En su primera visita al centro como Arzobispo

Monseñor Enrique Benavent preside la celebración de la Candelaria en el Colegio Imperial de San Vicente Ferrer En su primera visita al centro como Arzobispo

  • El centro con 270 alumnos y 95 internos, celebra la festividad en la víspera de la Presentación del Señor
  • Considerado como la institución benéfica en activo más antigua del mundo que ha funcionado de manera ininterrumpida desde su fundación, hace más de 600 años por San Vicente Ferrer.

 

El Arzobispo recorrió el centro junto al clavario del colegio, Jose Ignacio Llopez y el director del centro escolar , Vicente Revert. (Foto: Colegio Imperial)

El arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, ha visitado hoy, jueves, el Colegio Imperial de Niños Huérfanos San Vicente Ferrer, ubicado en la localidad de San Antonio de Benagéber, para presidir la celebración de la Candelaria, en la víspera de la festividad.

La eucaristía ha contado con la participación de los alumnos, residentes, profesores, tutores, personal del centro, junto a padres y familias, que han recibido a monseñor Benavent,  por primera vez como pastor de la iglesia que camina en Valencia.

Los alumnos han participado en la tradicional bendición de las candelas, que representan la luz del Espíritu Santo y que se celebra en la iglesia cada 2 de febrero, en la fiesta litúrgica de la Presentación del Señor. Los escolares se han cubierto con mantas de vestir durante la bendición, recuperando así la tradición típica de esta fiesta en las comarcas del interior de la Comunidad Valenciana.

Durante su visita, el Arzobispo ha recorrido las instalaciones del centro, compuesto por la residencia del Colegio Imperial y el centro escolar concertado Fundación San Vicente Ferrer.

La residencia cuenta con un total de diez tutorías integradas por 95 internos, con edades comprendidas entre 3 y 21 años, coordinadas por un equipo de 10 educadores que conviven con ellos “en un modelo propio de residencia, con el objetivo de crear un ambiente familiar, a modo de hogar”, señala el clavario-director, Jose Ignacio Llópez Guasp.

Igualmente, Colegio Fundación San Vicente Ferrer ofrece enseñanza obligatoria de Primaria y Secundaria a un total de 270 alumnos, “entre ellos los residentes con edades comprendidas en la enseñanza reglada, lo que favorece un ambiente integrador e inclusivo, sin discriminación”. Aún así “por motivos burocráticos ocho de los beneficiarios internos han de ser escolarizados en otros centros de la localidad, debilitando así su intervención y organización”.

La institución benéfica en activo más antigua del mundo

El Colegio Imperial ha acogido y educado, en sus más de 600 años de historia, a más de 30.000 niñas y niños, y está considerado como la institución benéfica en activo más antigua del mundo, porque ha funcionado de manera ininterrumpida desde su fundación, por el santo dominico valenciano San Vicente Ferrer.

El centro tiene como finalidad dar alojamiento, manutención, educación y formación moral, religiosa y social, lo más completa posible, actualizando la obra iniciada por san Vicente Ferrer, a niños de ambos sexos, necesitados y que sean huérfanos o se encuentren en una situación familiar semejante a la de orfandad.

En los últimos años, el Colegio ha reinterpretado el perfil de sus beneficiarios adaptándolo a las necesidades de la sociedad y ampliando sus requisitos, de forma que se propone como un recurso válido para familias monoparentales o con dificultades sociales, económicas y estructurales.

Labor pionera en la formación de niñas y reconocida con distinciones

En su estructura de casa-colegio, se convirtió en una de las primeras de Europa que enseñaba a leer y escribir a niñas ya en el siglo XVIII “diferenciándose de instituciones similares de aquella época, en las que tan solo se les instruía en labores, música, o en aquello que les pudiese servir para la vida en casa o en conventos religiosos”.

Entre otras distinciones, el Colegio Imperial de Niños Huérfanos San Vicente Ferrer ha recibido la Medalla de Oro de la ciudad de Valencia, la Distinción de la Generalitat Valenciana, el Premio ´Educación y Sociedad` del Colegio Oficial de Pedagogos y Psicopedagogos de la Comunidad Valenciana o el Premio Justicia de la Generalitat Valenciana. Además, ha sido candidato en varias convocatorias al Premio Princesa de Asturias de la Concordia.