11 Jul El Arzobispo de Valencia recibe al Obispo del Vicariato Apostólico de Requena de la selva peruana El franciscano monseñor Alejandro Adolfo Wiesse León
El Arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, ha recibido en audiencia al Obispo del Vicariato Apostólico de Requena, en Perú, monseñor Alejandro Adolfo Wiesse León, territorio con el que la archidiócesis de Valencia asume un compromiso misionero desde hace varios años.
Monseñor Wiesse, franciscano peruano, ha viajado a Valencia para agradecer a monseñor Benavent la colaboración de la diócesis de Valencia, “vengo cada año, desde mi nombramiento, para mantener un encuentro con D. Enrique y transmitirle la actualidad del Vicariato, compartir la experiencia de los misioneros y agradecer la solidaridad de todos los fieles valencianos que año tras año contribuyen con nuestra iglesia local”.
La solidaridad entre la Iglesia “se manifiesta en las oraciones, pero también de manera presencial con la visita cada año de seminaristas valencianos, acompañados por Arturo Javier Garcia”, delegado de misiones del Arzobispado de Valencia. Una visita, señala monseñor Wiesse, “muy positiva porque podemos compartir experiencias de comunidades cristianas en diferentes partes del mundo y en este caso de la Amazonía, a lo que tantas veces el Papa Francisco nos invita”.
Según el Obispo, el Vicariato de Requena “tiene muchas cosas positivas para compartir con esta Iglesia de Valencia, y también tiene sus carencias, debilidades y fracturas a nivel social, ya que estamos en el ambiente de la Amazonía, con gente muy vulnerable a problemas”, como la pobreza, el narcotráfico o la corrupción.
Monseñor Wiesse ha recalcado su agradecimiento a Valencia, “ si estamos en comunión, como dice el apóstol San Pablo, el dolor de alguien es mi dolor, la alegría de alguien es mi alegría” y ha animado a los valencianos a visitar el Vicariato, “esperamos misioneros laicos, que continúen viniendo seminaristas y animamos también que vengan jóvenes universitarios a conocer nuestra tierra”
Requena tiene 70.000 habitantes, con una extensión de 80.000 kilómetros cuadrados y el acceso a cada uno de los puestos de misión se hace a través del río. Para poder llegar a todos ellos se necesitan, a veces, hasta 12 ó 20 horas de camino.
Ante esta situación, los misioneros tienen un papel clave para llevar el Evangelio hasta los más alejados. Este territorio cuenta con 5 sacerdotes, entre los que se encuentra el valenciano Antonio Soriano, así como comunidades religiosas que trabajan día a día en la educación, salud, en comedores para niños y ancianos, así como la atención de los sacramentos de los fieles.