27 Ene Enrique Benavent: “La UCV es una realidad importante en la diócesis y en la sociedad valenciana” El arzobispo de Valencia, gran canciller de la UCV, ha presidido la eucaristía y el acto académico posterior
La Universidad Católica de Valencia (UCV) ha conmemorado la festividad de Santo Tomás de Aquino -patrono de las escuelas católicas, de las universidades y de la educación- en la sede Santa Úrsula con una misa y un acto académico presididos por el arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, gran canciller de la propia Universidad. El arzobispo ha afirmado que “la Universidad Católica es una realidad importante en la diócesis y en la sociedad valenciana”.
En ese sentido, Benavent ha pedido a los miembros de la comunidad universitaria que sigan trabajando “con el mismo espíritu eclesial”, pues “la Iglesia se hace grande” cuando los cristianos se entregan “con pasión” a su misión: “Si no se da en vosotros la pasión vocacional de santo Tomás, faltará algo importante en vuestra tarea universitaria. Recordemos que la Iglesia siempre ha visto en él un modelo de lo que debe ser el trabajo intelectual de toda institución universitaria y educativa católica: unión entre la ciencia y la vida de fe. Santo Tomás fue eminente por su dedicación a las ciencias sagradas y por su anhelo de santidad. De hecho, esto último es lo que le llevó a lo anterior”.
Así, Benavent ha subrayado en su bienvenida a los doctores incorporados al claustro los “principios” de la UCV: “Haced un esfuerzo para entrar en el espíritu de esta Universidad, cuyas bases fundacionales son una inspiración para ir siempre en búsqueda de la verdad”.
“La auténtica sabiduría nace de la búsqueda de la verdad y conduce al deseo del bien y de la justicia. Es más, la verdad es el único camino para llegar al bien y a la justicia. La búsqueda de una sociedad justa y del bien de los demás es solo posible cuando esta se fundamenta en la verdad sobre el hombre, sobre el mundo y sobre Dios. Una cultura relativista no tiene el fundamento auténtico que le lleve a buscar y alcanzar el bien y la justicia. Estos únicamente se pueden alcanzar cuando existe el deseo de buscar la verdad”, ha remarcado.
En referencia al “sabio” Tomás de Aquino, el gran canciller ha aducido que una universidad católica tiene que formar a sus estudiantes en el “espíritu de humildad” del Aquinate: “Santo Tomás jamás se enorgulleció de su gran obra intelectual, porque la sabiduría auténtica no es solo fruto de un esfuerzo intelectual; es un don de Dios que hay que pedir. Esta sabiduría no es terrena, viene de Dios y va más allá de la acumulación de saberes y de la inteligencia de la ciencia, pues transforma a la persona desde lo más profundo de su ser”.
“Toda acción educativa intenta llegar al corazón de las personas para transformarlo. Por esa razón, la institución universitaria solo tiene sentido si está al servicio de los estudiantes”, ha añadido.
José Manuel Pagán: “La sociedad no se transforma a través de una revolución impaciente, sino mediante una educación paciente fundada en el amor”
Por su parte, el rector, José Manuel Pagán, ha agradecido al gran canciller la “cercanía” que ha transmitido a la comunidad universitaria “desde que tomó posesión como arzobispo de Valencia” y ha expresado el “compromiso, entrega y determinación” de esta para contribuir a la “transformación de la sociedad a través de una educación paciente fundada en el amor”, contraria a la “revolución impaciente”, que nunca lo consigue.
Del mismo modo, Pagán ha trasladado a Benavent el deseo de la Universidad de ser un “instrumento útil” para la diócesis “que ofrezca certeza y sabiduría; que ayude a alcanzar para esta sociedad un progreso cultural auténtico; que estudie las raíces y las causas de los graves problemas del tiempo actual; que exprese sin miedo verdades incómodas, de esas que son necesarias para salvaguardar el bien social auténtico; y que, sin descuidar la adquisición de conocimientos útiles, se distinga por la búsqueda de toda la verdad acerca de la naturaleza, de la persona y de Dios”.
En ese sentido, el rector ha subrayado la necesidad de “volver al principio, al fundamento que inspiró la creación de las universidades europeas: volver a la verdad”, pues “el pensamiento moderno propuso romper con ella, renunciar a la existencia de una verdad objetiva, haciendo pensar que todo es relativo”.
“La misión de los profesores con los jóvenes que llenan nuestras aulas no es otra que la de llevarlos a la verdad. Ese es el principal acto de amor que podemos ofrecer a nuestros estudiantes, la verdadera caridad intelectual: despertar en ellos la pasión por la verdad. Para ello es fundamental que les demos testimonio de vida, que vivamos en primera persona la verdad que les proponemos; ser, en definitiva, testigos de esperanza para ellos”, ha remarcado.
Así, Pagán he hecho hincapié en que “el conocimiento de la verdad” es el que hará “personas libres” de los jóvenes: “Una libertad entendida no como pura indeterminación, como mera capacidad de elección o como ausencia de vínculos o compromisos; al contrario, una libertad que permita a nuestros jóvenes contraer vínculos, asumir compromisos y aceptar renuncias por algo valioso. No serán libres si no reciben una luz sobre las cuestiones centrales de nuestra existencia, sobre el sentido de nuestra vida. No olvidemos nunca que es la verdad la que nos hace libres”, ha indicado.
Jordi Piqué: “¡Cuánto se echa de menos una formación humanística total, como la conoció santo Tomás!”
El religioso dominico Jordi Piqué, presidente del Pontificio Instituto Litúrgico (PIL) de Roma (Italia), ha pronunciado la lección magistral, en la que ha sentado las bases para un ensayo de teología litúrgica en el ámbito musical a partir de la Suma Teológica de Tomás de Aquino.
En opinión de Piqué, “falta un lenguaje teológico adecuado para combinar ciencias tan diversas como la musicología y la liturgia. Falta una sólida formación teológica para batir el registro adecuado en cada momento y en cada período histórico. Al final se echa en falta una sensibilidad musical bien formada y bien fundamentada que permita acercamientos sin prejuicios. ¡Cuánto se echa de menos una formación humanística total, como la conoció santo Tomás!”.
“Falta un estudio serio del fenómeno musical en la filosofía: ¿será acaso posible? Creo que falta, no tanto desde un punto de vista histórico, sino desde un punto de vista verdaderamente filosófico. ¿Cómo puede el sonido convertirse en sabiduría y ésta ser amada? Un campo en el que algunos han entrado refiriéndose, sin embargo, al juicio estético o a una narración casi histórica”, ha manifestado Piqué.
El presidente del PIL ha subrayado también que “falta un afán sincero que se interpele sobre la necesidad de decir “Dios” hoy. Tal como santo Tomás lo hizo en su tiempo y otros muchos en épocas distintas y circunstancias no tan lejanas a la nuestra. No creo que nuestra época sea muy diversa de otras, pero no podemos dejar de dialogar con la realidad y buscar su interlocución”.
Birretes y medallas para los nuevos doctores
En el acto académico han participado junto al gran canciller y el rector, los miembros del Consejo de Gobierno, profesores, estudiantes y personal de administración y servicios. Durante la sesión se han impuesto los birretes a los nuevos doctores y la medalla a los profesores que se han incorporado al claustro docente.